Documentación científica (Dt3)

El tema a tratar esta vez es la documentación, cómo buscarla y cómo usarla. Hay varios métodos de búsqueda, que obviamente han ido cambiando con la historia. Es muy interesante el desarrollo histórico llevado a cabo por J.R. Pérez Álvarez-Ossorio en el capítulo introductorio de su libro “Introducción a la información y documentación científica”. Me llama la atención como en la “prehistoria”, centrándonos en la documentación científica, simplemente se nombra algún documento pero no empieza a hablar de “Edad Antigua y Media” hasta el momento del Journal des Sҫavants. Es decir hasta que no se da ninguna publicación oficial tratando temas científicos se considera que no hay ninguna aportación a la documentación científica, pero por el contrario si se habían dado avances científicos hasta la fecha. Se podría pensar que no es muy importante entonces la documentación, pero aquí es donde podemos notar la importancia de esta actividad científica que es documentarse. Si nos centramos en el periodo de crecimiento de documentación y difusión de información científica, se ve en relación también un incremento de la actividad científica, posiblemente conducida por la mayor facilidad de adquirir conocimientos en este campo.

Para responder a la pregunta de ¿cómo se busca hoy en día la información científica?, quizás se deba hacer una diferenciación en base al tipo de usuario que la esté buscando. Me explico; actualmente estudiantes universitarios o trabajadores de distintas empresas tecnológicas que requieran cierta información  científica para llevar a cabo un determinado trabajo, su principal instrumento de búsqueda de información es internet, bases de datos con estudios o casos similares a lo que esas personas están buscando y que generalmente son ya casi resúmenes de otros resúmenes. Es decir se centran más en las fuentes de información secundarias que se han tratado en el capítulo 3 del mismo libro anteriormente nombrado. Sin embargo, en mi opinión la gente más cercana al ámbito más puro de la ciencia, aquellos dedicados a realizar investigaciones o lo que sería un trabajo más por y para la ciencia, puedan estar más en el grupo de consumidores de revistas científicas o en general de fuentes primarias que otorgan a un plus de novedad en comparación con las fuentes secundarias. Con esto, no estoy negando que una persona fuera del ámbito científico pueda consumir de estas fuentes de información primarias, por el mero hecho de saber o conocer más sobre un tema, si bien toda generalización no es justa, si puede servir para plasmar con mayor facilidad una idea.


Por todo ello creo que si se da una relación bastante ajustada a la realidad en las lecturas, al menos según mi interpretación de cada una de las fuentes de información. Teniendo claro que cada tipo de fuente de información tiene un objetivo, y obviamente es importantísimo conocer cada una de ellas, ya que encontrar lo que buscas es más fácil si sabes dónde preguntar.

Comentarios

  1. Las fuentes secundarias (bases de datos y, hoy día también buscadores d einternet, que no es lo mismo pero solapan funciones) sirven para encontrar las primarias. También los científicos más académicos usan las fuentes secundarias para rastrear lo que se publica, pero para ir luego a los artículos primarios de interés. Yo creo que en entornos industriales hacen lo mismo. Lo que pasa es que hay muchos más documentos qu eles interesan (patentes, notas técnicas, notas de aplicación,...).

    ResponderEliminar

Publicar un comentario